viernes, 6 de mayo de 2016

Atrapó al menor que le robó, pero lo esposaron a él y lo dejaron preso

Casi entre lágrimas por la indignación, Omar Pueblas contó su historia de sinrazones y despropósitos, relacionada con el robo constante por parte de menores en la ciudad y el trato que recibió del personal policial. 

macri

En los últimos días, el hombre sufrió un intento de robo con la participación de cuatro chicos: pudo retener a uno en el piso, mientras su familia daba aviso al Comando Patrullas. Sin embargo, cuando los efectivos llegaron, lo acusaron de golpear al menor y lo llevaron esposado a la Comisaría, donde permaneció en un sucio calabozo por 24 horas. 
“No pude agarrar a los otros tres chicos que se fueron en bicicleta, sólo pude atrapar al que me rompió el espejo. Pero lo peor de toda esta situación fue el informe que pasó el personal del Comando Patrullas, porque dijeron que yo le había pegado al menor cuando en realidad lo tenía reducido”, contó. 
Pueblas remarcó el absurdo de la situación vivida: “Me quedé 24 horas preso por reducir al menor que había intentado robar en mi casa y tenerlo quieto hasta que llegue la policía. Me llevaron esposado a Fiscalía como si fuera un delincuente”. 
“Estoy indignado, porque hace menos de un año me entraron a robar a mi casa y no pude agarrarlos. Me había tenido que ir con mi hija a hacerle una operación a Buenos Aires, y cuando volví, el 10 de junio del año pasado, me habían entrado a robar. Me llevaron hasta ropa mía y de mi hija, hasta la mochila de la escuela”, recordó. 
Ante los micrófonos de LT20, el vecino resaltó que “soy un laburante que se levanta cada día a las 6 de la mañana, así que no entiendo cómo un chico de 16 años puede elegir los gobernantes pero la Justicia no puede juzgarlos porque es un menor”. 
A raíz de lo acontecido, quiere justicia: “He instruido a mi equipo de abogados para que lleven esto a las últimas consecuencias, por mis derechos humanos, porque yo soy un laburante, no tengo causas penales, me levanto como cada hombre y familia de Junín”. 

Una pesadilla. “Lo peor de todo es la falta de educación que tiene la policía del Comando, porque en vez de apaciguar las cosas, me provocaban a mí y a mi señora”, aseguró. 
Mientras “el chico no estuvo más de una hora veinte minutos en la comisaría, mientras que a mí me metieron en un calabozo donde faltaba solamente encontrar excrementos de la mugre que había. A mí me detuvieron por el informe que pasó el Comando Patrullas, una verdadera locura”, se quejó. 
Además, Pueblas resaltó que “cuando escucho la radio y leo los diarios para seguir los hechos en Junín, donde hay gente que le pone un cuchillo en el cuello a los chicos y a las viejitas para robarles, les pegan, y dicen que no los pueden detener porque son menores, no puedo creerlo”. 
También subrayó casos similares ocurridos en los últimos días en la ciudad: “Tengo un amigo que le robaron la moto que no había terminado de pagar; y hace poco se conoció el caso de un hombre que tuvo que pagar 5000 pesos para que le devuelvan la suya”. 
“Entonces me pregunto, en casos como lo que me sucedió a mí, ¿qué tengo que hacer? ¿Acompañarlos por la casa y preguntarles qué más se quieren llevar, porque son menores?”, dijo. 

“No es nada...”. “El espejo que me robaron cuesta $ 2500. La policía me dijo: ‘Pero eso no es nada... la vida del menor vale más’. Les pregunté si me hablaban en serio, cuando tuve un intento de robo y me contestan que no era nada eso”, expresó indignado. 
Pueblas concluyó su testimonio diciendo que “me dolió mucho en estos dos casos que me hayan llevado esposado, por haber intentado defender mi patrimonio y mi capital, que me gané laburando. El primer robo me costó $ 10.800 para reforzar y arreglar las puertas; y ahora necesito otros $ 10.000 para poner cámaras de seguridad y mostrarle a la Justicia quiénes son los que quisieron robarme”.